En la lucha que inauguró WrestleMania XXVII, Edge retuvo su Campeonato Mundial Completo tras imponerse al mexicano Alberto Del Río, que en varias ocasiones puso en predicamentos al monarca con candados al brazo izquierdo.
A fin de cuentas, la experiencia del canadiense terminó pesando, pues sus nueve apariciones anteriores en el gran evento de la WWE le permitieron sobreponerse de los predicamentos que le provocó el hijo de Dos Caras.
Sabedor de que el Monarca tenía la extremidad superior izquierda averiada, Del Río proyectó a Edge contra el esquinero y contra la mesa de los comentaristas para continuar haciendo estragos en la zona.
El ganador del Royal Rumble, acarició la victoria cuando desde el esquinero proyectó a la lona a su contrincante con un súper látigo; sin embargo, Edge salvó su calidad de Campeón al romper el conteo en dos segundos.
En el clímax de la batalla, ambos luchadores se enfrascaron en un toma y daca, primero la Súper Estrella Clasificación R ejecutó un Rompecaras sobre el retador que tras ser puesto espaldas planas interrumpió la cuenta de tres.
Una palanca al brazo con giro de Del Río a Edge y la posterior respuesta del Campeón con un medio cangrejo, antecedieron el final de la lucha. Cabe señalar que bajo el cuadrilátero Christian y Brodus Clay intercambiaron golpes, además de que Ricardo Rodríguez intervino a favor del mexicano.
El combate se decidió cuando después de que ambos gladiadores fueron capaces de resistir severos castigos de su oponente, el Superestrella Clasificación R propinó al potosino una Lanza que lo dejó viendo estrellas y listo para ser puesto de espaldas y escuchar la cuenta de tres.
Con el descalabro de Del Río, se frustra la posibilidad de que por primera vez un luchador nacido en México se corone Campeón Mundial de la WWE.
Fuente: Record
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